Los colorantes en polvo son hidrosolubles, formulados para dosificación de 0,2gr x Kg de producto terminado pero, dependerá del tipo de alimento y del fabricante la cantidad de colorante que se usará. Puede aplicarse en manzanas confitadas, helados, crema chantilly, refresco en polvo, budines, pastillaje, mazapán, masas (sopaipillas, pasteles, etc…), productos lácteos, productos de confitería. También aplica para jabones artesanales, preferidos por su acción hipoalergénica.